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martes, 3 de julio de 2007

Inalcanzables los Objetivos del Milenio?

Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: Una misión de Naciones Unidas reparte comida en Etiopía, febrero 2006

El cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio no está nada asegurado. El informe que Naciones Unidas presenta a mitad del camino si bien manifiesta progresos, no deja mucho espacio al optimismo.



Reducir la pobreza del mundo a la mitad hasta el 2015 fue el gran objetivo de la Declaración del Milenio, que poco antes de entrar al siglo XXi firmaron los 189 Estados miembro de Naciones Unidas. A mitad de camino, un informe de Naciones Unidas habla de innegables progresos, que ponen de relieve, sobre todo, lo mucho que falta por hacer.

Cuestión de dinero

Para lograrlos, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, instó a los países ricos a cumplir su promesa de aumentar la ayuda al desarrollo; se trata concretamente de destinar a este rubro el 0,7% de su producto interno bruto. El que se concluyese las negociaciones de la Ronda de Doha ayudaría a reducir las disparidades del comercio mundial y sería, así Ban Ki Moon, otro gran aporte para que los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) - formulados en 2001 por Naciones Unidas, Banco Mundial y la OCDE- no sean palabras al viento. Cabe resaltar que a pesar del compromiso asumido en 2005 durante la Cumbre del G-8 en Gleeneagles, la ayuda al Africa, en vez de ser doblada ha bajado en un 5,1%.Bildunterschrift: Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: Ban Ki Moon, secretario general de Naciones Unidas

Erradicar la pobreza extrema y el hambre

El más importante de los ODM es la reducción de la pobreza extrema. En este punto, el progreso visto en cifras es innegable. Si en 1990, 1250 millones de personas vivían con menos de un dólar diario, según el informa en este momento son 980 millones. Y eso a pesar del crecimiento demográfico de las regiones especialmente afectadas por el hambre. Organizaciones no gubernamentales como Oxfam critican este logro, basadas principalmente en lo relativo de medir la pobreza con el ingreso diario en dólares.

Reducir la mortalidad infantil

Tampoco en cuanto en cuanto al cuarto ODM, reducir la mortalidad infantil, hay margen para el optimismo: el más reciente informe de la UNICEF asevera que cada tres segundos muere un niño víctima de enfermedades curables. Uno de cada tres niños en los países en vías de desarrollo se encuentra desnutrido.
"La muerte masiva y evitable de los niños es un escándalo ante el cual no podemos cerrar los ojos", declaró la presidenta de UNICEF Alemania, Heide Simonis. A pesar de la lucha contra campañas como el sarampión, en África aumenta la mortalidad infantil, sobre todo en las regiones en donde el SIDA se expande. Con vacunas, mosquiteros y formación de parteras y obstetrices se podría evitar la muerte de cientos de miles de niños asevera UNICEF.

Bildunterschrift: Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: Del calendario 2003 de UNICEF


Combatir el SIDA y otras enfermedades

El cumplimiento de otro de los objetivos del milenio, combatir el SIDA, también parece bastante lejano. Las cifras presentadas por Naciones Unidas, con motivo del día internacional del SIDA en diciembre de 2006, no dejan mucho espacio para la alegría: si bien es cierto que de 2005 a 2006 tanto la cantidad total de enfermos como la de nuevas infecciones se redujo, sólo en 2006 hubo más de cuatro mil millones de nuevos contagios, casi 26 millones de ellos en África.

Bildunterschrift: Niños enfermos de SIDA en un hospicio en Etiopía


No todo es malo

Sin embargo, "a nivel mundial, más niños están asistiendo a la escuela, las mujeres han avanzando en el área de derechos igualitarios y la mortalidad infantil ha bajado gracias a medidas tales como la vacunación", se asevera en el informe. Resalta también que se ha expandido el control de la malaria y está declinando la epidemia de la tuberculosis.
A pesar de que los progresos van a paso lento, el secretario general de la ONU hace gala de optimismo : "todavía es posible cumplirlos en la mayoría de los países", recalca. Teniendo todo lo anterior en cuenta, la pregunta que sigue abierta se reduce a una palabra: ¿cómo?

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